OTRAS MIRADAS HACIA LA VIOLENCIA DE GÉNERO. JORNADAS INTERNACIONALES DE ANÁLISIS INTERDISCIPLINAR DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO.
1
Este es un poema para una mujer que lava platos.
Este es un poema para una mujer que lava platos.
Debe ser repetido.
Debe ser repetido
una y otra vez,
una y otra vez
porque la mujer que lava platos
porque la mujer que lava platos
no puede oír bien
no puede oír bien.
2
Este es otro poema para una mujer
limpiando el piso
que no oye del todo.
Un minuto de silencio
para la mujer que limpia el piso.
3
Y otro poema más
para la mujer que está en casa
con los niños.
Nunca la ves por las noches.
Quédate mirando un espacio vacío
e imagínala allí,
a esa mujer con los niños
porque no puede estar aquí para hablar
por sí misma,
y escucha
lo que piensas"
que ella puede decir.
Susan Griffin ( EEUU, 1943)
Poesía minimalista norteamericana, Ed. Los libros de Orfeo
Una segunda aproximación a la violencia de género fue la que aportan las obras literarias o el cine.
Novela negra, ficción policiaca-criminal, son formas de abordar la violencia suscitando la crítica, poniendo de manifiesto los delitos cometidos, haciéndolos visibles y también sacando a la luz los sentimientos, los horrores de las mujeres maltratadas.
Algunos ejemplos de obras literarias que hablan de la violencia contra las mujeres:
"La mujer que se estrellaba contra las puertas" Roddy Doyle.
"Paula Spencer" Roddy Doyle.
"Casa Paterna" María Messina.
"Reacción" Susan Faludi.
"Toda pasión apagada" Vita Sackville-west.
Por otro lado, Amparo Pedregal menciona el papel de las religiones en la raíz de la violencia contra las mujeres.
En la mayoría de las religiones monoteístas y panteístas las mujeres aparecen como seres secundarios a los que se les puede aplicar la fuerza mientras que deben autocorregirse a través de la culpa y del dolor.
Las religiones reproducen el patriarcado dominante en algunos países. El patriarcado no existe sin violencia, es la expresión de la dominación.
Las sociedades patriarcales tienen muy definida la paternidad. La creación viene de la fuerza del creador a través del sometimiento de la mujer, no de la maternidad en sí. La mujer aplaca la culpa con el dolor y el sacrificio.
Aportando múltiples ejemplos de los textos religiosos, Pedregal desentraña uno de los fundamentos en el pensamiento occidental: la asociación entre masculinidad y divinidad.
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