EL ENTORNO FAMILIAR Y LOS CUIDADOS EN LA ENFERMEDAD CRÓNICA PEDIÁTRICA
Cuidar es una responsabilidad que la familia asume y prioriza para mejorar la calidad de vida del niño o de la niña enfermo/a, pero esta cualidad precisa de un fortalecimiento propio, un bienestar para poder asumir el peso del cuidado a largo plazo. El desequilibrio introducido por la enfermedad del hijo o la hija influye considerablemente en la relación de pareja. Si ésta no era muy consistente antes del nacimiento del hijo, ahora se verá más resentida. Cada miembro de la pareja estará en una situación complicada por varios frentes: su propio desarrollo vital/ personal, su relación con el otro/la otra y la relación con los hijos. En los periodos críticos se anteponen acciones y dinámicas relacionadas con la enfermedad dejando en un segundo plano los procesos de cambio y crecimiento familiar, lo que lleva a que la pareja se atenúe o desaparezca para asumir el rol de padres que cuidan y se preocupan de un hijo/a con enfermedad crónica. Cuando el niño o la niña